Llego la
hora del postre y si se trata de uno fácil, rápido y sin horno, mucho mejor.
Con esta receta paso a paso aprenderás a preparar un espectacular postre frío
con queso crema y leche condensada, una combinación de sabores clásica en
muchos postres pero que sin necesidad de añadir mucho más, ya te permite
obtener un plato maravilloso.
La tarta de queso Philadelphia con leche condensada que te enseñamos lleva como ingrediente especial la cuajada, lo que permitirá que solidifique ligeramente sin necesidad de usar el horno.
Si esto ya
te ha convencido, vamos a manos a la obra, y si no, recuerda que cuando esta
tarta de queso esté lista, podrás completarla con tus sabores favoritos,
añadiendo una decoración extra a tu gusto.
Ingredientes:
(x10 personas)
Base de
Galletas
- 1 Paquete de Galletas María (200 Gramos)
- 50 Gramos de Mantequilla
Tarta de
Queso
- 250 Gramos de Queso Philadelphia
- 370 Gramos de Leche condensada
- 200 Mililitros de Nata líquida o Crema de leche
- 200 Mililitros de Leche
- 2 Sobres de Cuajada
Preparación:
Empezaremos
por hacer la base de galletas para nuestra tarta de queso y leche condensada.
Para ello, tritura las galletas hasta hacerlas polvo y mezclalas con la
mantequilla, previamente derretida.
Amasa todo y
forra la base de un molde desmontable con esta masa de galletas. Aplasta un
poco con los dedos, procurando que toda la superficie quede de la misma altura.
Reserva.
Ahora, para
hacer el relleno de queso y leche condensada, lo primero será disolver los
sobres de cuajada en la leche. Una vez que compruebes que se haya disuelto por
completo reserva.
Aparte,
coloca el resto de los ingredientes de la lista en la licuadora y bate todo
hasta integrar.
Truco:
Puedes añadir un poco de vainilla o cualquier otra esencia que te guste.
Coloca esta
mezcla en una olla y lleva a fuego medio hasta que hierva. Cuando rompa este
hervor añadimos la cuajada disuelta en la leche y batimos nuevamente el
conjunto con ayuda de unas varillas eléctricas hasta integrar. Esperamos que
vuelva a romper un hervor y retiramos del fuego.
Recuerda que
es importante batir constantemente.
Vacía la
mezcla de Philadelphia y leche condensada sobre la base de galletas que tenemos
lista en nuestro molde desmontable. Entonces conserva en la nevera al menos
unas tres horas hasta que la tarta cuaje y termine de solidificar.
Así
tendremos listo nuestro postre frío sin horno.
Pasado este
tiempo ya puedes sacar de la nevera y disfrutar de la rica tarta de
Philadelphia y leche condensada. Para decorar, nada mejor con unas finas líneas
de leche condensada por encima o si prefieres algún tipo de mermelada casera
que te gusté.
Si te ha
gustado la receta de Tarta de queso Philadelphia con leche condensada, te invito a seguir mi blog y a dejarme tu comentario.
Fuente: Recetas Gratis
No hay comentarios:
Publicar un comentario